La conservación de las creencias de la fe cristiana es la función más importante de toda la cultura recopilativa medieval y es también, por lo tanto, el tema básico de la escultura.
relatos con arte
Lo que sigue es un intento de utilizar la ficción para motivar el aprendizaje de la Historia de Arte. Lo que sigue son pequeños relatos apócrifos, reflexiones, descripciones, cartas o poemas. Textos inventados siempre, pero inspirados en la historia, para mostrar los sentidos de las obras o adaptarlos a nosotros. En ellos se hace hablar al autor, a un personaje, a un crítico, a un mecenas, a un profesor o a un espectador que nos cuentan sus razones, su manera de ver, su sentimiento o su reflexión ante la imagen plástica. Se intenta llevar a los ojos a un nivel correcto de enfoque (que no pretende ser único o excluyente de otros, pero que sí se pretende interesante) y animar a la lectura de lo que se ve, o lo que es lo mismo, educar la mirada y disfrutar del conocimiento, concediendo al contenido, al fondo de las obras, un papel relevante que en nuestras clases, necesariamente formalistas, se suele marginar.
Vírgenes trono
La conservación de las creencias de la fe cristiana es la función más importante de toda la cultura recopilativa medieval y es también, por lo tanto, el tema básico de la escultura.
Sin salida
Nighthawks (1942) (Halcones de la noche). 84,1 cm × 152,4 cm . Instituto de Arte de Chicago. Edward Hopper |
Un hombre que también llevaba sombrero y que vestía con un traje azul marino semejante al que Ed lucía aquella noche, estaba sentado de espaldas, justo delante de la pareja. Me pareció ver que Ed movió los labios. Seguramente fue tan sólo una pregunta intrascendente, porque el camarero apenas se inmutó. En efecto, el hombre vestido de blanco, siguió su labor inclinado y tan sólo levantó un poco la vista. Pensé en que probablemente Ed acababa de pedirle algo, porque Jo siguió mirando hacia delante con una mirada ausente... Parecía que la noche estaba sosa, que ninguno tenía nada que decirse y que pronto decidirían irse a la cama a descansar. Sin embargo, algo pasó en aquel momento, porque el tipo que estaba de espaldas comenzó a levantar su cabeza...
Por efecto de lo dicho, algún mecanismo extraño se puso en funcionamiento. Yo dibujé los límites triangulares de la barra en la que el camarero parecía estar enclaustrado y me di cuenta de que Ed y Jo estaban atrapados en el fondo del local, de que estaban a merced del aquel individuo que estaba mirando a Jo. La puerta estaba muy lejos, la puerta no se veía... No tenían por dónde escapar... Entonces Jo movió su largo cuello de gacela, enfrentó la mirada sombría de aquel hombre y también lo comprendió.
La planta de Chartres
Los tres tiempos del pecado
El pecado original y al expulsión del paraíso. Fresco. Ermita de Maderuelo de Segovia. Museo del Prado. Madrid. |
Esta verdad intemporal pretende seguir salvándonos, porque no hace falta ser cristiano ni ir a una iglesia santificada ni saber arte para entender el mensaje de la vergüenza y del arrepentimiento.
Plantas románicas
San Isidoro. León |
San Martín. Frómista |
Catedral de Santiago |
La catedral de los reyes de Francia
Catedral de Reims. Francia. Siglo XIII. Fachada principal a los pies. |
Anunciación y Visitación. Piedra caliza. Siglo XIII. Fachada principal de la Catedral de Reims. Francia. |
La torre más alta de España
Poca gente sabe, por ejemplo, que el edificio, que supera por muy poco los cien metros de altura, fue el edificio más alto de España durante muchos siglos, desde que se concluye el primitivo alminar almohade (que culminaba a 82 m) a finales del siglo XII, en 1198, o cuando se culmina con el Giraldillo y la construcción renacentista de Fernán Ruiz, en 1568, (con lo que adquirió su altura actual que supera por poco los 100m) y hasta que es superada en el siglo XX por los "rascacielos" del Madrid de la Gran Vía.
El barroco rapta el alma de Sevilla, que vive en su Semana Santa el drama anual de la pasión de Cristo como una historia propia, pero su símbolo verdadero, el icono que mantienen en sus brazos las Santas Justa y Rufina, patronas de la ciudad, es la torre culminada por esa fe giratoria que se orienta hacia los cuatro puntos cardinales, según la fuerza del viento.
Capiteles historiados
http://www.youtube.com/watch?NR=1&v=e6_ZlJupYDw
Las naves de San Julián
http://www.youtube.com/watch?v=BKMFQJ9NKJM&feature=related
Santificar nuestra lana
La adoración al Cordero Místico. Huberto y Jan Van Eyck. 1432. Político-óleo sobre tabla. 350 por 223 cm. Catedral de San Bavón. Gante. Bélgica. |
Los ciudadanos de Gante somos burgueses ricos. Nuestro negocio son los buenos tejidos de lana que fabrican nuestros campesinos, durante el invierno, y que nosotros vendemos por toda Europa. De eso vivimos bien, al menos en comparación con otras ciudades y zonas de Europa sin comercio. Por eso, con destino a la capilla que he adquirido en nuestra catedral de San Bavón, encomendé a los hermanos Huberto y Jan Van Eyck la realización de un políptico, pintado con esa nueva técnica que emplea aceite de linaza como aglutinante del color. El tema elegido es el de la glorificación del cordero, el cual no sólo es el símbolo del sacrificio de Cristo en la Cruz, sino también la fuente de la riqueza de nuestra ciudad.
Jerusalén celestial. Detalle. |
Procesión de las santas mártires. Detalle. |
Por la obra que he pagado, espero de Dios penitencia y de los hombres que admiren nuestra lana, nuestra bendita lana de Gante.
http://www.youtube.com/watch?v=xwJKfhLMhEk&feature=related
Una araña feminista
Maman. Louise Bourgeois. Sobre 9 m de alto. Bronce y mármol. 1990-2000. Exterior del Museo Guggenheim. Bilbao |
Mostrar el andamiaje
Por fuera, tras la sucinta estructura metálica que nos da la sensación de un andamiaje coyuntural, nos encontramos con los distintos circuitos del edificio que se muestran (especialmente en la fachada trasera) a través de la exhibición de tubos y conducciones de color azul para el aire (climatización), verde para los fluidos (circuitos de agua), amarillo para los revestimientos eléctricos, y rojo para las comunicaciones (ascensores) y la seguridad (bombas contra incendios). De este modo se muestra la continuidad de unos sistemas autónomos, que normalmente están ocultos. Entre ellos, destacan en especial las escaleras de acceso que se adosan a la fachada principal del edificio, como un elemento agregado y coloreado por el rojo convencional de las comunicaciones. La escalera parece un gran diagrama lineal ascendente. Cuando uno sube por ella, contempla el interior del museo, con las salas destinadas a exposición en algunos pisos y con las habitaciones y despachos destinados a los trabajadores y a la gestión del museo en los otros, porque ya no existe un muro opaco con ventanas. Como ya no hay fachada, solo queda una fina piel de cristal transparente, la que separa el aire libre del espacio interno. Pues bien, cuando se acaban las escaleras mecánicas y se contemplan los tejados de las casas del barrio del Baubourg, uno siente una sensación de dominio, la sensación de quien culmina la escala del progreso, ese mito de la ilustración que, a finales de los setenta, recién acabado el edificio, con la posmodernidad, va a entrar ya en crisis.
http://www.youtube.com/watch?v=L_oP4aBzfH0&feature=player_embedded#!
Unidad de habitación
Unidad de habitación de Marsella. Edificio de apartamentos. Le Corbusier. 1948. Marsella. Francia. |
También se interrumpe la regularidad de la sucesión de los apartamentos en el centro del edificio, a la mitad de su altura, en donde se sitúa una zona de servicios comerciales, un hotel, un restaurante y un gran salón de actos. Y por si esto fuera poco, además, en la terraza plana superior, hay una guardería, una piscina, un gimnasio, una pequeña pista de atletismo y otros espacios de relación que me recuerdan a los de las termas de Roma.
Todo un ejercicio de planificación, por lo tanto, según las necesidades del hombre urbano del siglo XX, con la idea de crear un pequeño conjunto casi autosuficiente, un pequeño pueblo de más de 1000 personas, que habitan los apartamentos construidos con una arquitectura económica atenta a minimizar el costo y al uso de nuevos materiales, sobre todo el hormigón, con una estructura siempre ortogonal, que permite la regularidad exterior de cada uno de los pisos horizontales y el cerramiento de la fachada con ventanales casi continuos.
Al poco tiempo de la Unidad de Habitación de Marsella, en 1955 proyectó para Nantes la "Maison Radieuse", que fue construida en régimen de cooperativa autogestionada por sus moradores, los cuales adquirirían 65 años más tarde la propiedad, después de pagar cantidades muy asequibles por los 294 apartamentos de 90 metros cuadrados. Así Le Corbusier expresaba su deseo de que la arquitectura sirviera para resolver, también, problemas sociales.
Tan sólo hay un pequeño elemento vertical en el bloque: Es esa falsa chimenea paralelepipédica que en realidad es el remate para el hueco del ascensor, aunque a mi siempre me ha parecido la chimenea de un gran barco. Así es. Yo no sé por qué me pasa, pero cuando miro el edificio, rodeado de matorrales y de árboles mediterráneos, lo veo como si fuera un gran trasatlántico, como un dado alargado que navega y que está lleno de pequeños trozos de vida, los de los habitantes que viven en esos apartamentos duplex, como pequeñas abejas de una gran colmena de colores, que flota en la tierra verde.
Hidalgo español
El caballero de la mano en el pecho. El Greco. (1584). Óleo sobre lienzo. 81,8 por 65,8 m. Museo del Prado. Madrid. |
Miradle bien a los ojos: Es un hombre delgado y joven, mucho más joven de lo que aparenta a primera vista. Sus cabellos y su barba son oscuros. Tan sólo una precoz calvicie introduce dos entradas en su frente. Está serio. Su rostro parece alargarse por un efecto de espiritualización y sus párpados parecen comenzar a cerrarse, como si la figura estuviese pensando. ¿En qué piensa el caballero? Si miramos la disposición de su cuerpo comprenderemos lo que hace. Fijaos en que está de frente y que lo común en los retratos del renacimiento es que se produzcan de perfil (Quattrocento) o de tres cuartos (Cinquecento) para dar profundidad con el escorzo del tronco. Hay que pensar, por lo tanto, que la extraña disposición frontal es significativa, y lo es, lo sabemos. Hablar de frente, enfrentarse con algo es intentar resolverlo, es manifestar rectitud, huir de la mixtificación y del engaño. Además, el movimiento de la mano resulta aún más expresivo. La mano se acerca al corazón. Está jurando. Una luz que viene de arriba lo ilumina. La divina trascendencia de la luz... Además hay otros elementos que se empeñan en decirnos que estamos ante un caballero. El signo más evidente es la espada, la empuñadura dorada y rica, que es el signo de los nobles, del estamento que hace la guerra. Basta ver la galería de retratos de los asistentes al entierro del Conde de Orgaz para llegar a la conclusión de que las vestiduras negras y la golilla son comunes entre los caballeros castellanos. Todos ellos, incluidos los hidalgos, visten como el rey prudente, Felipe II, porque su aspecto externo ha de huir de las vanidades del color. Lo mismo sucede con los cabellos, que son cortos, y con la barba recortada. Sus manos, además, no son manos de campesino ni de artesano, son manos nobles, cuidadas, sin los callos y las deformidades del trabajo. Su rostro es pálido, no es el rostro de un hombre que vive en el campo, sino el de un servidor del rey o del cardenal de Toledo en un cargo administrativo. En su expresión, sin embargo, no aflora el orgullo del noble, su rostro es austero, magro, casi enjuto, el de un hombre que no abusa de los placeres del vino o de la comida, un hombre acostumbrado al severo ejercicio de la templanza que se aleja de los vicios del sexo y se alía con las virtudes cristianas.