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| Autorretrato como fuente. Bruce Nauman. 1967 |
relatos con arte
Lo que sigue es un intento de utilizar la ficción para motivar el aprendizaje de la Historia de Arte. Lo que sigue son pequeños relatos apócrifos, reflexiones, descripciones, cartas o poemas. Textos inventados siempre, pero inspirados en la historia, para mostrar los sentidos de las obras o adaptarlos a nosotros. En ellos se hace hablar al autor, a un personaje, a un crítico, a un mecenas, a un profesor o a un espectador que nos cuentan sus razones, su manera de ver, su sentimiento o su reflexión ante la imagen plástica. Se intenta llevar a los ojos a un nivel correcto de enfoque (que no pretende ser único o excluyente de otros, pero que sí se pretende interesante) y animar a la lectura de lo que se ve, o lo que es lo mismo, educar la mirada y disfrutar del conocimiento, concediendo al contenido, al fondo de las obras, un papel relevante que en nuestras clases, necesariamente formalistas, se suele marginar.
La fuente (II)
El templo de la cultura
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| Museo del Prado, Madrid, Juan de Villanueva, 1786 |

El edificio, situado al lado del Jardín Botánico, en el que también trabaja Juan de Villanueva, destaca por su horizontalidad, por la mezcla de materiales (piedra y ladrillo) y por el uso de un orden gigante en la fachada hexástila de estilo dórico-toscano, en contigüidad con el orden jónico de la galería del segundo piso. Además hay en el interior, cúpulas y bóvedas de cañón con lunetos, decoradas con casetones, y arcos de medio punto y más columnas jónicas, que atestiguan la influencia del renacimiento y de los clásicos.
Destaca también, por su función nueva, casi deconocida, de museo, de templo de la cultura, lo que manifiesta una fe en el progreso muy propia de la ilustración, y por la racionalidad de su distribución interna, que acumula los espacios expositivos en las habitaciones traseras, mientras reserva la línea de la fachada al Paseo del Prado para el espacio elemental de relación, ese que se compone de unas largas galerías superpuestas, a las que se suma la rotonda y el patio circular, que son los centros geométricos del cuadrado de los dos pabellones Norte y Sur.En el centro del edificio, tras la fachada de la puerta de Velázquez, que se adelanta al conjunto, hay una pequeña pronaos que da acceso al arranque de la gran galería y a una gran sala posterior, rematada en forma de ábside, que nos avisa de que estamos en el templo de la cultura. Un templo hexástilo, con seis columnas como las seis letras del nombre del rey Carlos III, el rey que impulsa las reformas.
Para distanciarse de las apoteósis barrocas de sus antecesores, los déspotas ilustrados construyen edificios para el pueblo inspirados en la armonía del idealismo clásico. Cultura y progreso para el pueblo bajo el signo de la razón y el equilibrio.
La muñeca concebida sin pecado.
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| Inmaculada. Sacristía Catedral Granada |
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| Inmaculada. Madera pª. Alonso Cano. 1656 |
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| Con peana y armarito. |
Es tan pequeña la Virgen, que al mirarla siempre pienso en las muñecas que tenían mis hermanas... Me diréis que soy un loco y un machista, y algún punto incorregible de ambas cosas hay en este comentario, pero el modelo femenino e infantil que nos presenta Alonso Cano me convence mucho más que el atractivo inconsciente de la Barbie o que la dulce inexpresividad de la mayor parte de las muñecas de mis hermanas, me parece más sincera su expresión delicada y obediente que la expresión orgullosa con sonrisa prefabricada de las modelos de pasarela o que la insolente distancia de los autorretratos de Cindy Sherman...
He pensado mucho en ella, tan pequeña y vulnerable, encerrada en una cárcel de madera y cubierta por barrotes de cristal. Me parece que allí está impregnada de una especial tristeza. Está en la ciudad de la Alhambra, en una catedral que resume como ninguna el gótico y el renacimiento, en una amplia sacristía barroca... He pensado en escribir al arzobispo de Granada para que la saque de esa caja tan horrible y la deje en libertad, si es posible sobre el antiguo facistol para el que fue concebida, sin pecado original.
El profeta en su tierra
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| El profeta. Gargallo. Detalle |
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| El profeta. Gargallo. 1933. Mº Reina Sofía. |
La abstinencia de los Cartujos
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| San Hugo en el refectorio de los Cartujos. Zurbarán. (1630-35). Óleo sobre lienzo. 267x320 cm. Museo de BB AA de Sevilla |
Trinitario
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| San Carlino. Roma. Borromini |
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| San Carlos de las Cuatro Fuentes. Roma |
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| San Carlino. Planta iglesia. Borromini. |
Otra cuestión es justificar la forma cóncavo-convexa de esta última en su cuerpo inferior, lo cual, a mi modo de ver, es una solución al problema de la contigüidad del chaflán con la fuente. La línea recta hubiera sido una mala solución, dado el ángulo impuesto por la pared de la fuente preexistente. Además, la solución curva, con el saliente convexo central del primer cuerpo destaca el espacio central de la puerta, al tiempo que dignifica la estatua de San Carlos Borromeo, que se encuentra sobre ella, aunque sea a costa de minimizar la importancia de los otros dos fundadores de la orden, que aparecen en las hornacinas de las calles laterales. Sobre el entablamento concavo-convexo del cuerpo inferior con su inscripción alusiva, sitúa un segundo cuerpo triplemente cóncavo, lo que produce una interesante terraza en su calle central, bajo el óvalo de una gran cartela culminante. En esta terraza se abre una gran ventana que sirve como elemento de iluminación de la base de la cúpula.
De este modo la luz acaricia la superficie ondulada de los muros del interior de la iglesia y se derrama de arriba abajo y desde los pies de la planta, en forma de rombo de lados curvos, hacia el altar, situado en el vértice redondeado del lado opuesto, que es el territorio más oscuro de la iglesia. De este modo la luz etérea en su lucha apasionada por llegar hasta el altar seduce a los sólidos muros y los transforma en ondas líquidas que parecen dejar claro que la luz divina es capaz de todo.



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